No modificar el sistema de cotización de los autónomos, sería un ataque a la economía de las zonas menos pobladas
La mayoría de las actividades económicas que se desarrollan en entornos rurales de nuestro país, no superan los 900 euros al mes de rendimientos netos.
En su mayoría se trata de pequeños negocios que son elementos indispensables de la economía rural: tiendas de alimentación, bares, talleres de reparación, profesionales de reformas, además de las pequeñas explotaciones ganaderas o agrícolas.
En el rural, los consumidores son, en la mayor parte de las actividades, residentes del entorno, por ello la facturación que generan estos establecimientos es muy pequeña y los rendimientos de trabajo declarados son modestos.
Sin embargo, el actual sistema de cotización al RETA es tan injusto, que obliga a un autónomo de un pequeño pueblo rural a tener que hacer frente al pago de la cuota mensual de 294 euros, exactamente igual que al propietario de un negocio en el centro de una gran ciudad.
El sistema de cotización debe modificarse de forma urgente, ha dejado de ser justo y equitativo, no atiende al principio objetivo de cotizar por los ingresos que obtiene la persona trabajadora autónoma, como ocurre con el trabajo por cuenta ajena.
Eduardo Abad, presidente de UPTA, “en este sentido, desde UPTA no podemos entender que se estén originando algunas iniciativas políticas como las del Partido Popular, en forma de mociones en los parlamentos autonómicos y en el Congreso de los Diputados. Es absolutamente reprochable que se utilice a nuestro colectivo de esta manera y que se torpedeen las negociaciones que mantenemos las organizaciones representativas del trabajo autónomo, los agentes sociales y el Ministerio de Inclusión”.